martes, 28 de abril de 2015

Morir de amor


 Morir de amor es una gilipollez, de hecho, nadie se ha muerto de amor.

Cuando me separé, creí morir en ese momento y fue, mi terapeuta, la que me dijo que nadie se moría en esa situación así que, aunque me quisiera cortar las venas o dejármelas largas, lo vi claro. Mi momento no había llegado.

Romeo y Julieta casi pero no...que éstos lo que hicieron fue suicidarse y eso, hasta ahora, no es morir de amor. Vaya pareja de taraos, pobres.

Me quedo con las palabras de Riso " ¿ Para qué quieres un amor en cuidados intensivos o agonizante? Amar es vivir a la enésima potencia. El amor debe ser una experiencia que te haga crecer, que te haga vivir la vida con mayor intensidad, con alegría, así que nunca contemples la posibilidad de " morir de amor", si sientes que mueres por amor es mejor que bajes las revoluciones y reflexiones sobre la forma como estás amando" o directamente salgas corriendo hacia el lado contrario.

Pues eso, que más vale no querer a querer de forma equivocada.

 Un poco de trabajo interior deberíamos hacer cada uno para saber si sabemos o no querer, supongo que saber sabemos pero no de la forma adecuada, aquí cada uno va a lo suyo y claro, luego a llorar y a morirnos. No es plan!

Objetivo: aprender a querer de forma correcta